En estos últimos días antes de la venida del Señor, debemos ser aquellos que hacen grandes resoluciones de corazón y grandes escudriñamientos de corazón.
Cada “hoy” que tenemos es verdaderamente la gracia del Señor; mientras tengamos el día de hoy, y mientras nos quede aliento, debemos amar al Señor y Su manifestación, esperar la venida del Señor, y siempre considerar Su venida como un ánimo.
Mateo 24:27 – Porque así como el relámpago sale del oriente y brilla hasta el occidente, así será también la venida del Hijo del Hombre.